Arte Sagrado del Tantra

Es una práctica que incorpora la vitalidad, lo sagrado, la energía, el amor, la espiritualidad trayéndolas a la vida y a la relación. Tantra es el arte de unirse en profundidad, desde el alma y amar con plenitud, para crecer, brillar y gozar sin límites ni prisas…Los tántricos saben que la receta del placer se cocina a fuego lento. 

Esta disciplina, es una filosofía de vida, una gran ciencia. Suele ser malinterpretada, relacionada siempre con una forma de sexo espiritualizado que reúne una colección de técnicas para mejorar nuestras relaciones sexuales. De hecho el sexo solo es una parte ínfima de un ala del tantra. Que enfatiza y trabaja con la no renunciación, la fluidez, la entrega, el ritual, las ceremonias, la meditación y el misticismo.

Es Una vía y herramienta para la auto-realización y consciencia individual muy poderosa y rápida, que te ayudará a la apertura metal y a conectar con el corazón. Una filosofía de vida desde el compartir y el disfrutar con consciencia.

Para el Tantra mediante la complacencia y aceptación del deseo con consciencia, sintiendo a la vez una aceptación profunda de tu ser culminará en una transcendencia a través de ti mismo, Llegando al mismo punto. La Totalidad y con ello la libertad de disfrutar con plenitud.

El Tantra es una vía, un camino completo de autorrealización. Basado en la sabiduría acumulada durante siglos de investigación acerca del significado de la vida y de la consciencia. El Tantra es un conjunto de herramientas muy poderosas para la transformación, pueden ser utilizadas para dar un nuevo significado y llenar de dicha a cada aspecto de nuestra vida cotidiana.

Para el Tantra todo es Sagrado. Parte de un entendimiento no-dual. Es una entrega a la unidad de una forma sentida a través de la experiencia, nunca intelectualizada. Es el camino del amor, la entrega y la feminidad. En el momento que llegues a sentir “Yo No Soy” desaparecerá el ego y conectaras con el vacío/unidad/amor incondicional. Solo así podrás partir de una verdadera entrega. Cuando uno se entrega se vuelve profundidad, no altura. La existencia comienza a entrar a raudales llenando totalmente cada experiencia con consciencia.

En el rico y complejo mundo de la mitología Hindú, Shiva es una manifestación de algo supremo. Un más allá, escapando de la compresión de los mismos dioses. Representa el aspecto de la muerte y la destrucción. Es un personaje complejo, con muchas facetas. Es a Shiva al que se atribuyen los sutras, de mas de cinco mil años de antigüedad. Puntualizamos la faceta de la representación de Shiva mitad hombre mitad mujer, del dúo; Shiva-Shakti, la parte masculina de la danza eterna de lo masculino y femenino.

Shiva-Shakti existen en conjunción inseparables. Una de las metas del Tántrismo, es trasladar esa fusión transcendente de los dos principios al individuo. Una de las técnicas para llegar es mediante el encuentro sexual. Las cédulas básicas de tu ser y cuerpo son sexuales. Es la energía básica a través de la que has nacido. Es tu energía y la puedes utilizar como peldaño o puente de unión con lo Divino, el cosmos, universo o totalidad. Cuando entras en el mundo profundo e íntimo del amor con consciencia, la persona amada y las formas desaparecen y el cuerpo se convierte en el templo y en la puerta de fusión con el universo. La apertura y cura de todos tus chacras, cuerpo emocional y mental con consciencia e integración, hacen que vivas desde otra realidad, con gozo y dicha por la vida y los seres que te rodean.

No te limites por tu cuerpo Se libre de sentir e integrar la energía y sus formas, su crecimiento al fluir en ti.

Tanto para el Tantra como para el psicoanálisis, nadie es sólo varón o sólo hembra; los dos sexos están presentes. Somos almas en vehículos/cuerpos. Todos podemos ser adróginos, o desarrollar más una energía que otra, es independiente e indiferente a tu condición y orientación sexual. Lo ideal es poder tener un equilibrio con las dos energías masculinas y femeninas. Desarrollar, integrar y sanar las dos energías en uno, Yin y Yang. Estar en nuestro centro, completos, desde hay podremos compartir y fusionarnos con el otro. Una unión desde el compartir sin tanta carencia, necesidad de complementar lo que yo creo que no tengo con el otro. Pero si trabajando e integrando las dos polaridades, principios en la relación para que esa unión sea verdaderamente poderosa. Se genere la luz y la transformación en comunión.

Conocer bien nuestras limitaciones, miedos, emociones, patrones, nuestra polaridades (energías y manejo de la mismas) todos nuestros cuerpos, será de vital importancia para la comunión de esa relación, crecimiento de consciencia y fusión íntima con el otro. 

Tantra es tu propia transformación, un cambio de la forma de sentir, de pensar y de actuar en armonía plena con lo natural, con disfrutar, poco a poco te sumerges profundamente en la naturaleza que te sostiene, en la creatividad, en la vida aceptada tal cual, con el cuerpo, vives la energía con la vida de una forma más sana, liberadora, placentera y amorosa. Cuando el acto de amor es desde solo los genitales/instinto, desde el placer físico, sin dar y recibir emoción, sin conectar con corazón/amor consciente, solo para aliviar tensiones, energía acumulada en el cuerpo, eyacular inconscientemente, Cómo simple alivio. Nos relaja físicamente pero nos produce insatisfacción, debilidad y vació en grandes ocasiones.

Cuando comprendemos nuestra naturaleza espiritual, conexión, la sexualidad y sensualidad es una vía de compartir, luz, amor y sabiduría, consciencia y sanación. Se comparte desde el Ser o Alma, el corazón queda lleno de luz, el cuerpo lleno de armonía y paz, conexión del espíritu y energía creativa, prosperidad y confianza. Éxtasis y dicha. La sexualidad consciente es nuestra propia alma danzando y compartiendo con plenitud y gozo el corazón pulsaste del universo.

Ese estado lo puedes vivenciar/plasmar en cada aspecto de tu vida, si fluyes desde esa vibración, vivir desde el amor consciente. Ese es el camino y sentido del Tantra. Por eso es una filosofía de vida una vez la integras. Cuanto más amor, más energía y cuanta más energía más consciencia y más energía recibida.

Muerte, sexo, meditación: Quién mejor que Shiva para ligar estos conceptos. Destructor y amante. El Dios con las más humanas aspiraciones. Elevarse sobre sí mismo y desvelar los secretos de todo lo desconocido. Con su intensa y vibrante vida, mediante los sutras nos muestra un mapa de cómo llegar al manantial. Del sexo a la supraconciencia. De la espiritualidad a la ciencia. Masculino y femenino. Yin y yang. Paradojas de todas las grandes tradiciones espirituales. Seremos rescatados de todas nuestras ideas del bien y el mal, de lo superior o inferior. Mediante la complacencia volveremos a La Totalidad y con ello a la libertad de disfrutar con plenitud.

La práctica del Tantra

En este sentido, en Tantra no se niega nada, ni se evita, ni se esconde; muy por el contrario, todo forma parte de esta interacción, y cada forma particular de energía es convidada a participar en esta celebración, incluyendo nuestros aspectos menos resueltos.

De ahí que el camino del Tantra es el camino de la aceptación de todo, y se busca incorporar y amar todas nuestras partes, dándoles espacio de expresión y de integración.

Esencialmente, existen dos modalidades de práctica, el tantra blanco y el tantra rojo. El tantra blanco se refiere a todas aquellas prácticas que el “tantrica” realiza consigo mismo, utilizando técnicas basadas en la respiración, los “mudras” (gestos o posiciones de ciertas partes del cuerpo que se utilizan para sellar o contener la energía, o para hacerla circular), los “bandhas” (contracciones de ciertos músculos que se usan para generar energía en el cuerpo), los “mantras” (verbalización de frases y sonidos que se utilizan para activar la energía en diferentes centros o sintonizarse con ellos), los “yantras” (visualización de imágenes, colores y figuras geométricas), y muchas otras más…